A 25 años del magnicidio de Lomas Taurinas.
@estadofallidomx
La versión que siempre ha mostrado elementos sólidos sobre
el magnicidio es que fue un crimen fraguado desde el primer círculo del poder
político.
Concretamente desde un poderoso despacho. Ahí se concentró
una élite política que impidió el ascenso de Colosio.
Altas figuras de la política salinista se dieron cuenta de
que Colosio representaba otra visión y perspectiva del Estado Mexicano y que
por ende perderían sus privilegios.
Sin embargo debe subrayarse que también existen elementos
para sostener que el magnicidio se orquestó a espaldas del entonces presidente
de la República.
Durante años, Salinas fue construyendo la figura de Colosio.
Lo impulsó para la diputación federal, el Senado, el PRI, la
Secretaría de Desarrollo Social. Lo llevó desde la base hasta la cúpula de la
política nacional.
Era su hechura.
Si hay alguien a quien afectó política e históricamente el
magnicidio de Lomas Taurinas fue precisamente a Carlos Salinas de Gortari. En un escenario imparcial debe verse que fue
una componenda orquestada a sus espaldas.
Fue en realidad un Golpe de Estado.
Por supuesto que hay quienes saben la verdad de lo ocurrido:
Liebano Saenz y Manlio Fabio Beltrones saben perfectamente lo que ocurrió
DETRÁS de la tarde del 23 de marzo de 1994 en Tijuana.
Tanto Liebano como Manlio deben escribir la verdad de lo
sucedido. Aunque dejen instrucciones para que esas revelaciones se hagan
públicas después de algunos años.
Se lo deben a Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Se lo deben.
tw @estadofallidomx
Comentarios
Publicar un comentario